Portonovo es una villa marinera situada entre Paxariñas y Sanxenxo, en la ría de Pontevedra. La actividad pesquera, que todavía marca el compás de una parte de su población, ha moldeado su identidad durante siglos, aunque en el presente sea el turismo su principal motor económico. Razones no le faltan, como demuestran sus playas con Bandera Azul (Baltar, por ejemplo), los miradores (A Peixeira) o sus actividades náuticas, como los viajes hasta la isla de Ons ofrecidos por la naviera mar de ons portonovo.
Por su privilegiada situación, los alrededores de esta localidad son atractivos para el turismo: el Cabo Udra, el Parque Nacional de las Islas Atlánticas, etcétera. Sin embargo, Portonovo cuenta con argumentos suficientes para retener a sus visitantes. La playa de Baltar es sin duda uno de sus mayores reclamos.
Este arenal de seiscientos metros está resguardada del oleaje por un espigón y dispone de servicios y equipamientos a la altura (duchas, pasarelas, aseos públicos o socorristas). Posee unas arenas finas y blancas y su forma de media luna encaja en el arquetipo de playa gallega. Otros destinos de sol y playa en Portonovo son Canelas y Caneliñas.
Otra parada obligada para el turismo es el mirador de A Peixeira, que despliega una amplia panorámica de la ría pontevedresa y sus proximidades. La mayor parte de los viajeros acude a este mirador en busca de selfies y fotografías de postal o simplemente de una vista agradable, pero a todos sorprende el monumento en bronce dedicado a las mujeres que vendían el pescado, obra del escultor local Alfonso Vilar Lamelas.
Por su parte, el puerto pesquero junto a Baltar regala a los viajeros una estampa muy marinera, con los barcos, las grúas y las gentes de mar faenando para nutrir las subastas de la lonxa, celebradas de lunes a viernes. También sirve de punto de partida a los tours en catamarán, los paseos en kayak y otras experiencias náuticas.