La ciudad más poblada de Galicia es además un importante destino de turismo náutico. Los puertos deportivos en Vigo muestran una ocupación cercana al cien por cien durante la temporada alta. Y es que año tras año, miles de viajeros acuden a informarse a la taquilla mar de ons vigo y de otras empresas navieras, en busca de un pasaje con destino a Ons, Cíes y otros enclaves de interés.
La ría de Vigo, epicentro de la actividad pesquera local, es el punto de partida de la mayor parte de las excursiones a la Isla de Ons. Situada a unos veinte kilómetros del municipio vigués, este destino perteneciente a las Islas Atlánticas atrae a los visitantes por sus playas de arena blanca, como Melide, Canexol o As Dornas. Tampoco decepcionan sus rutas de senderismo, ni sus experiencias gastronómicas, pues aquí se sirve la mejor versión de la empanada de maíz o los peitxiños fritos.
El turismo náutico también se sustenta en las ‘Islas de los Dioses’, como el geógrafo Ptolomeo bautizó al archipiélago formado por las islas de Monteagudo, do Faro y San Martín. La playa de Rotas no es su única atracción; destacan asimismo las rutas de trekking de Alto do Príncipe, Faro da Porta o Faro do Peito. Por su parte, Sálvora y Cortegada completan el tour isleño por el Parque Nacional Marítimo-Terrestre de las Islas Atlánticas.
Pero esta modalidad turística también se disfruta en tierra firme. El Real Club Náutico de Vigo, uno de los emblemas de la ciudad, cuenta con instalaciones centenarias que acogen una biblioteca, una ludoteca, un spa y un salón para eventos.
El paseo marítimo, que discurre paralelamente a la playa de Samil, deleita a los visitantes con paisajes, cafeterías y restaurantes de excepción, discotecas al estilo after hours, una bolera y hasta un museo: la Casa das Palabras.